Nuestro blog

La agotadora e incesante pandemia

Diego Tapia Figueroa, Ph.D. y Maritza Crespo Balderrama, M.A.

“El único verdadero viaje de descubrimiento consiste no en buscar nuevos paisajes, sino en mirar con nuevos ojos” 
(Marcel Proust)

Las fuerzas enemigas, 1902, de Gustav Klimt.

Aceptar y abrazar la incertidumbre y la complejidad como un camino posible para dar sentido a nuestras existencias, es lo que podemos hacer para invitar a conectarnos con lo humano diverso, alegre y doloroso; hacerlo desde una perspectiva rizomática, que permanentemente crea conexiones, relaciones con los otros, construyendo -y construyéndonos conversacionalmente en diálogos reflexivos y significativos- un diálogo transformador, que eso es crear un lenguaje común para un futuro con posibilidades.

Desde nuestro contexto, en Ecuador vemos que aquí, al igual que en el mundo, existe un desgaste sostenido, angustioso de las condiciones materiales de existencia de la mayoría de la sociedad y más dificultades para construir relaciones que nos generen bienestar social, común; todo esto exacerbado por la pandemia, que produce una crispación social, y evidentes sensaciones y percepciones de desmoralización, aislamiento, miedo, desasosiego y frustración. Hablar de recuperar la esperanza sin un contexto relacional consistente es retórica y demagogia. Tejer redes de relaciones significativas abre las posibilidades responsables para generar aquello que podría ser y para ser con los otros, el tipo de personas que nos gustaría ser.

En este contexto, nos parece útil reproducir este breve mensaje del Taos Institute (https://www.taosinstitute.net/)

Un mensaje de la Junta de Taos:

Son tiempos angustiosos que claman compasión, conciencia y brújula. En medio de la pandemia, la angustia económica, las injusticias raciales y la violencia desenfrenada, muchos de nosotros nos preguntamos qué nos depara el futuro. ¿Còmo Podemos Hacer La Diferencia? Parece que no hay mejor momento para llegar más allá de nuestra comunidad y compartir los recursos relacionales que hemos cultivado. ¿Cómo podemos reconocer simultáneamente nuestra decepción, indignación y miedo mientras nos enfocamos en pequeños pero significativos actos de apoyo y reconexión? ¿Cómo podemos solidarizarnos con los que más sufren? ¿Cómo podemos hablar con nuestros vecinos, nuestros parientes, nuestros amigos y nuestros colegas de manera que inspiren una acción generativa? ¿Cómo podemos recoger estos poderosos sentimientos que abarrotan nuestra conciencia y canalizarlos para crear nuevos futuros? Ahora más que nunca. ~ La Junta Directiva del Instituto Taos.

Medicina, 1862, de Gustav Klimt.

A lo largo de estos dos últimos años marcados por el Covid-19, como IRYSE hemos planteado diversos temas para la reflexión de nuestros lectores buscando, en algunos casos, continuar, y en otros, iniciar, diálogos que puedan hacer la diferencia, de forma pragmática en la propia vida.  No hemos, intencionadamente, tocado insistentemente el tema de la pandemia, reconociendo que era suficiente con las noticias cotidianas, dolorosas, terribles, terroríficas, y el dolor que las pérdidas de seres queridos en todo el mundo estaban causando y que nos gusta iniciar diálogos que aporten, que surjan desde la curiosidad y que puedan abrir otros horizontes.

Sin embargo, es innegable que muchos de nuestros consultantes y colegas, incluso nosotros mismos, nos hemos visto tocados por el confinamiento, las restricciones en cuanto al contacto físico y la incertidumbre frente a la vida. Ciertamente, estamos atravesando momentos complejos, tanto en lo personal, lo profesional, como en lo comunitario.

Se acerca el aniversario número cuatro de nuestra primera entrada en el blog (26 de enero del 2018), que hemos alimentado cada 15 días sin falta, con la alegría que nos da el hecho de que cada vez más y de más diversos lugares, recibimos retroalimentaciones y comentarios positivos y/o reflexivos sobre nuestro trabajo y constancia quincenal; y, si bien no existen certezas, pensamos que cada uno puede, desde su posición y con sus propios recursos y fortalezas, generar espacios para la reflexión y el aprendizaje conjunto, que permitan, de alguna manera, resignificar estos momentos de dolor, soledad, miedos y pérdidas.

Las palabras construyen realidades.  Que las palabras que digamos a los otros, cercanos y lejanos, construyan nuevas formas de mirarnos, sostenidas en el respeto, la aceptación y la curiosidad; que lo que nuestro planeta está atravesando, no nos deje indiferentes y podamos crear conjuntamente nuevas formas de interrelacionarnos, desde una postura relacional, generativa.  Que podamos invitar a construirnos desde nuevos recursos y fortalezas, con la conciencia de que estamos todos en el mismo viaje ¿o naufragio?

La pandemia de Covid-19 es un desafío más por el que atraviesa la humanidad; el trabajo contra el abuso sexual a niños, niñas y adolescentes, el empeño por conseguir la equidad de género, otra postura relacional para el trabajo profesional en y con procesos terapéuticos-educativos-de formación-capacitación, y el respeto y aceptación de la diversidad, el esfuerzo por erradicar todas las formas de violencia, opresión, explotación y exclusión todavía siguen siendo parte de la agenda de quienes creemos que se puede vivir en contextos humanos socialmente distintos, en los que nos relacionemos de forma democrática, justa, digna, equitativa y participativa y asumiendo con responsabilidad y sentido del mañana la corresponsabilidad por el bienestar propio y de los demás.

En esta incesante búsqueda, como IRYSE, agradecemos su  lectura, apertura, confianza y diferencia. Invitándonos a nuevas formas de hablar, responder, tratarnos, cuidarnos y construir proyectos de futuro.

“- Si tu casa se incendiase, ¿qué te llevarías?

– Me llevaría el fuego.”

(Jean Cocteau)

Jardín de la cabaña, 1905, de Gustav Klimt.

2 Comments

  • Elizabeth Moncayo

    Felicitaciones Maritza y Diego por estos 4 años de IRYSE, es un súper blog, gracias por los temas y la forma como se exponen, cada quincena es una invitación a mirarnos desde nuestro realidad pero que se abre a otras realidades, aprendizajes que me construyen y nos construyen como seres interrelacionados.
    Felicitaciones por este 4to aniversario.